UNA PROPUESTA INNOVADORA
Café de higo: Emprendimiento que diversifica la potencialidad de Villa Abecia
El municipio de Villa Abecia, tierra del singani y el vino también conocida como Camataqui y situada en el corazón del Cañón de los Cintis, en Chuquisaca, presenta una propuesta innovadora: el café de higo, bebida libre de cafeína y gluten que, además, ofrece distintas propiedades medicinales.
El 6 de marzo de este año, madre e hija, Ninet Daroca y Ninet Samos Daroca, inspiradas en la abundancia de higos que caracteriza a su tierra y motivadas por los ejemplos de otros países, que ya producían este tipo de café, dieron inicio a su emprendimiento.
“El higo ha sido siempre una de nuestras frutas preferidas. Mis hijos y nietos disfrutan venir a comerlos directamente de la planta, bajo su sombra, compartiendo risas y momentos simples pero llenos de vida”, dice Ninet a CORREO DEL SUR.
Confiesa que su vínculo con la tierra fue clave para iniciar este proyecto. “Siempre he sentido una conexión especial con las higueras y verlas pasar por todas sus estaciones, desde los primeros brotes hasta el fruto maduro, es un regalo que me llena de gratitud”.
Cuenta que el proceso comenzó desde cero, creando la receta paso a paso hasta encontrar el equilibrio perfecto entre aroma y sabor. “Puse todo mi amor y dedicación en lograrlo”, recuerda con orgullo.
ALTERNATIVA SALUDABLE
Ese mismo compromiso y cuidado se reflejan en el resultado final del producto. Según Samos, el café de higo se distingue por ser libre de cafeína, gluten y conservantes, lo que lo convierte en una alternativa saludable al café tradicional. Aunque no contiene cafeína, proporciona una fuente de energía suave y sostenible, gracias a los carbohidratos y azúcares naturales del higo.
Además, esta bebida ofrece múltiples beneficios para la salud: ayuda a combatir afecciones cutáneas, respiratorias, digestivas y cardiovasculares; es rica en antioxidantes, posee propiedades antiinflamatorias y tiene un bajo contenido calórico.
El higo seco, base del producto, concentra minerales esenciales como calcio, sodio, fósforo, hierro y potasio, y contiene fibra soluble, que contribuye a regular los niveles de colesterol y glucosa en la sangre.
Consciente de todas estas propiedades, Daroca agrega que este proyecto también representa una forma de servicio a los demás. “Quizás podría decir que es una manera de servir a las personas que no pueden consumir cafeína, para que también ellas disfruten de ese pequeño placer diario sin renunciar al aroma, al calor y a la ternura de una buena taza compartida”, señala.
PROCESO
El proceso comienza con la recolección de los higos maduros, que luego son deshidratados al sol durante varios días sobre esteras tradicionales de la región. Una vez secos, los frutos se seleccionan cuidadosamente, se tuestan y finalmente se muelen para obtener el café de higo.
Daroca prefiere reservar los detalles más específicos de tostado y molido, ya que forman parte de la receta artesanal que le da identidad al producto.
DESARROLLO
A ocho meses del emprendimiento, destaca que este café es mucho más que una bebida.
“Es una manera de expresar mi amor por el campo, por la tierra y por todo lo que nos da. El higo no es solo un fruto, es una joya de nuestra naturaleza llena de cualidades que ahora queremos compartir con los demás, taza a taza”, finaliza.


